Puedo estar en el pétalo de glicina que cae.
Estoy en una montaña contemplando la luna que acabo de pintar. La nieve se derrite y la poesía baja en hilos, hasta perderse...
La barcaza que me lleva se mece entre oriente y occidente.
Les muestro mi montaña, la luna y mi mar.
domingo, 28 de junio de 2009
Pobreza en el mundo
El ojo abierto que no ve
Una lenteja en un plato blanco
El lunar enfermo que opaca la luz de la mejor luna.
Alguna vez charlando con Don Zaiper hemos comentado que debería existir la categoría "Keiko". Poder decir por ej. "es un Keiko" refiriéndose, claro, a un texto tan sobresaliente como sublime de belleza.
Hermoso Keiko, siempre.
Y gracias por contemplar el arte de la Aldea, es un tremendo honor para mí.
Qué buen juego que hacés: mostrar lo imperfecto a través de una figura perfecta.
ResponderEliminar¿Qué más puedo agregar que no hayas dicho con tan pocas palabras? Como siempre Keiko, sos genial.
Muy bueno... y lo del lunar enfermo es genial
ResponderEliminar¡Eeeeeehhhhhhh, Keiko! ¡Que sintesis mas bella!
ResponderEliminarBesos
ohhh! Gracias!!!
ResponderEliminarSeguramente escriba otras cosas... estoy preocupada. Me duele tanta pobreza, tanta enfermedad.
Muy pero muy bueno!!
ResponderEliminarQue tristeza con un lunar nos tape la luna, que los ojos se vuelvan incapaces
Muchoss saludos
No sé cómo hacés...
ResponderEliminarAlguna vez charlando con Don Zaiper hemos comentado que debería existir la categoría "Keiko". Poder decir por ej. "es un Keiko" refiriéndose, claro, a un texto tan sobresaliente como sublime de belleza.
Hermoso Keiko, siempre.
Y gracias por contemplar el arte de la Aldea, es un tremendo honor para mí.
Besos!
Gracias Vane!!!... pero, ¡qué exagerada!
ResponderEliminar(De Sebas ya sabía que es un exagerado!...)
Me encantó lo que hacés, debe ser un mundo mágico...y la fusión con la literatura, más todavía.