Puedo estar en el pétalo de glicina que cae.
Estoy en una montaña contemplando la luna que acabo de pintar. La nieve se derrite y la poesía baja en hilos, hasta perderse...
La barcaza que me lleva se mece entre oriente y occidente.
Les muestro mi montaña, la luna y mi mar.
Flor... te contesto porque yo también soy atrevida, y además, curiosa!
Mi árbol se sostiene en las raíces del nivel inicial y se extiende hasta las ramas del Superior. En ellas se cobijan pájaros de poesía, pétalos de pintura. Vientos de música mueven todas sus hojas, y acarician pimpollos y yemas.
Una casa con un sol,un bote en el agua...maravilloso.
ResponderEliminarDe atrevida nomás te pregunto:¿en qué rama de la docencia te desempeñás?
¡Todo un artista!
ResponderEliminarQué bello regalo
Gracias por compartirlo =)
Flor...
ResponderEliminarte contesto porque yo también soy atrevida, y además, curiosa!
Mi árbol se sostiene en las raíces del nivel inicial y se extiende hasta las ramas del Superior. En ellas se cobijan pájaros de poesía, pétalos de pintura. Vientos de música mueven todas sus hojas, y acarician pimpollos y yemas.
La savia es el afecto, es el amor.
Y Gaspar, es un niño extraordinario...
Besos!
KEIKO:
ResponderEliminarGracias por contestarme. En la docencia,a veces, son los alumnos los que te abren la cabeza.
Besos (a vos y a Gaspar)